La terapia de estimulación adecuada puede ser beneficiosa para personas de todas las edades y con una variedad de necesidades y condiciones, incluyendo niños con retrasos en el desarrollo, trastornos del espectro autista, discapacidades físicas o intelectuales, y personas mayores con deterioro cognitivo. En resumen, la terapia de estimulación adecuada es un enfoque terapéutico que se centra en proporcionar un entorno enriquecido y estimulante para promover el desarrollo y el bienestar de las personas. Se adapta a las necesidades individuales de cada persona y utiliza una variedad de técnicas y actividades para fomentar el aprendizaje, la exploración y la interacción.